¿Ya te habías preguntado por qué los niños utilizan los crayones y no lápices cuando están aprendiendo a trazar?
Los crayones al ser gruesos brindan mayor estabilidad y seguridad a la hora del trazado tanto de dibujos como de letras.
En Little Play te contamos por qué son primero los crayones y luego el lápiz en los niños, sigue leyendo para enterarte de la verdad.
A partir de los 18 meses tu pequeño podrá tomar un crayón para comenzar a realizar garabatos sobre una hoja de papel.
En un principio los trazos serán inestables, algunos fuera de la línea en que debía colorear, pero poco a poco irá adquiriendo mayor control.
Cuando adquiera mayor control y dominio de la crayola, tu pequeño comenzará a respetar los límites de los dibujos que está coloreando.
Este desarrollo de sus habilidades se irá dando poco a poco y en función de la constancia con la que haga trazos y coloree.
BENEFICIOS DE LOS CRAYONES EN LOS NIÑOS
- Desarrolla habilidades motoras finas y gruesas, gracias al tamaño y forma.
- Gracias a que son de cera, ayudan a tu pequeño a desplazar sobre la hoja el crayón para dibujar fácilmente.
- No se necesita sacapuntas para que tu pequeño siga trabajando, diversión y trazos ilimitados.
- Ayuda con la coordinación ojo-mano al ser de punta gruesa y trazar con facilidad en el lugar adecuado.
- Los pequeños pueden pintar con sus crayolas sobre la textura que ellos deseen, incluso sobre el piso.
- Suelen ser muy económicas, de buena calidad y cuentan con al menos 10 o 12 colores básicos.
DESVENTAJA
- Tienden a romperse fácilmente, por ello es recomendable usar los más gruesos en los niños pequeños ya que no pueden controlar la fuerza del trazo.
- No se pueden borrar los trazos de ninguna manera.
Te sugerimos leer nuestro artículo ya publicado “¡TIENES QUE CONOCER LOS 8 BENEFICIOS DE ARMAR ROMPECABEZAS!”, sólo da clic aquí, para conocer cómo beneficiar la motricidad fina.
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