El desarrollo de la inteligencia viene en gran parte determinado por componentes genéticos, es decir, el o la niña podrá desarrollar en cierta medida algunas aptitudes y habilidades de acuerdo a su genética y a la estimulación que le brinden en su entorno a través de la libertad para conocer el mundo y diversos juegos.
¿Qué es la inteligencia?
Se puede definir la inteligencia como la capacidad del ser humano para comprender, analizar, entender y razonar para la solución de problemas y conflictos, en pocas palabras incluye todos los procesos de pensamiento.
¿Cómo se desarrolla la inteligencia?
La inteligencia tiene dos componentes esenciales:
Genética: Numerosos estudios han aportado que gran parte del componente genético se encuentra en el cromosoma X.
Las mujeres al tener el doble de este cromosoma (XX), tienen mayor aporte genético al componente de la inteligencia. Por lo tanto, es bien sabido que la madre aporta esto.
Ambiente: el ambiente y la estimulación que se le proporcione al niño, será también determinante, debido a que desde pequeños es necesario dotar de diversos estímulos, esto determinará la arquitectura del cerebro del niño. Y esto incluye diversas cosas como son: la nutrición y el cuidado del niño, cubrir todas sus necesidades, así como brindar afecto y cariño.
Inteligencias múltiples
¿Has escuchado el término de inteligencias múltiples?
Howard Gardner mencionaba que la inteligencia no es un conjunto de algo, más bien, agrupa varias capacidades específicas que cada ser humano va adaptando a las áreas de vida del ser humano.
Probablemente piensas que la inteligencia engloba sólo aspectos académicos pero lo real es que existen varios tipos:
Lingüístico verbal: Son los modelos de inteligencia que se basan en la formación del pensamiento mediante el lenguaje verbal, puede ser; escrito u oral.
Númerica: Aquella que tiene que ver con los procesos lógico-matematicos.
Espacial: Tiene que ver con la percepción del entorno y de las formas que subyacen a lo visto.
Emocional: Se trata del manejo y regulación de las propias emociones así como saber expresarlas de manera adecuada.
Social: Es aquella inteligencia que tiene que ver con las relaciones interpersonales y cómo nos relacionamos con otros de manera adecuada y óptima.
Músical: se expresa en la habilidad para tocar instrumentos o crear música.
Inteligencia intrapersonal: Es la capacidad para conocerse a sí mismo.