Lo que tienes que saber del estrés infantil

¿Sabías que el estrés no es exclusivo de adultos? ¡También tus hijos lo pueden estar sufriendo! Mira cómo ayudarlo.

El estrés es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones preocupantes o complicadas que suelen causar un sentimiento de tensión físico y emocional a la vez.

¿Cómo se manifiesta el estrés en los pequeños?

Dificultades para dormir.
Pesadillas recurrentes
Cambios en el apetito, puede que coman mucho o que casi no coman.
Irritabilidad de manera constante y frecuente
Dolor de cabeza
Empezar a mojar la cama o hacerlo frecuentemente.
Molestia estomacal o dolor de estómago
Otros síntomas físicos sin ninguna enfermedad física
Bajo rendimiento escolar si ya van a la escuela.
Cansancio o apatía en sus actividades regulares.

Algunos de los anteriores son similares a los de un adulto, sin embargo ellos aún están pequeñitos para saber que es estrés lo que sienten, por ello te damos algunas ideas para ayudar a tu peque.

¿Cómo ayudar a reducir el estrés de tu hijo?

Enséñale a parar, a respirar y a poner atención en su cuerpo, a identificar qué está sintiendo.

Dale contención emocional, abrázalo y apapachalo, necesita de tu cariño aún más en estos momentos.
Llevalo a actividades que lo relajen, para ellos consigue juguetes antiestrés como una pelotita de esponja o juguetes pop-it para que pueda apretar cada vez que lo necesite.
Hagan juntos un bote sensorial.
Ten al alcance una hoja y colores para que pueda rayar en todas direcciones cada vez que se sienta frustrado o estresado.
Procuren hacer actividades al aire libre para conseguir que tu peque se relaje, actividades de contacto con la naturaleza, actividades artísticas y manualidades.