Beneficios del método Montessori en la habitación de tu pequeño

¿Sabías que una habitación Montessori promueve la autonomía y la experimentación en los pequeños?

El método Montessori es un sistema de educación centrado en el respeto a los derechos de los niños y en su capacidad espontánea para aprender.

Tiene como principio básico el que los niños tengan completa libertad para aprender y desarrollarse por sí solos, en un ambiente de comprensión y cariño que sea estimulante.

Si quieres que tu pequeño aprenda bajo este método, es importante que lo apliques desde los primeros años, comenzando por su habitación.

El entorno desde este método tiene que estar pensado desde la perspectiva del bebé o del niño, siendo así, más cómodo para él, más accesible y que le permita moverse con libertad por el espacio.

¿Qué se necesita para una habitación Montessori?

Paredes: Se recomienda pegar láminas y espejos a una altura adecuada para que él pueda observarlas y observarse a sí mismo para estimular la observación y aprendizaje.

Colores: Se debe optar por colores más cálidos, que fomenten la tranquilidad y la armonía en ese espacio.

Suelo: Un suelo cálido con alfombra o tapered, libre de objetos para que tu pequeño camine descalzo.

Cama: A ras del suelo para que el niño se acueste y se levante sin necesitar la ayuda de nadie.

Mobiliario: La idea es que tu pequeño tenga todas sus cosas al alcance y pueda disponer de ellas según las necesite (ropa, juguetes, etc.) por lo que su tamaño debe estar adaptado al tamaño de tu pequeño, lo que implica que deberán ir transformándose a medida que crezcan.