Traer un hijo al mundo es una de las mejores experiencias que se pueden tener en la vida, ya que es un proceso largo y con miedos constantes que sacuden el camino de los padres primerizos. 

Las preocupaciones y dudas son muchas, por lo que hoy aquí te contamos algunos consejos que te serán útiles si es que serás  padre/madre primerizo.

1. ¿Tiene mi bebé suficiente cantidad para alimentarse?

Al principio, puede ser un desafío encontrar un buen ritmo entre el sueño y las comidas del niño. Si la madre está amamantando, es importante que sientas que el bebé prospera con la lactancia. Lo más importante es que el niño crezca y esté saciado, ya sea que estés amamantando o dándole un biberón.

2. ¿Cuánto se debe estimular a un bebé recién nacido?

Los bebés recién nacidos necesitan mucho contacto físico y cercanía. Es importante mantener al niño cerca, dándole mucho contacto piel con piel, meciéndose y acariciándolo. 

3. ¿Llora demasiado mi hijo?

Si crees que tu hijo está llorando mucho y te cuesta demasiado consolarlo, entonces es una buena idea visitar al médico, para una orientación. Es importante averiguar por qué el bebé está llorando. El llanto es natural y es la forma con la que el niño dice que algo no es como debería ser. Sin embargo, es preferible que el niño se calme cuando lo levantes, lo consueles, le des leche, le cambies el pañal, etc.

4. ¿No se debe tocar la fontanela al bebé?

Las fontanelas son las separaciones que existen entre los huecos del cráneo del bebé. Facilitan que la cabecita pueda amoldarse y atravesar el canal del parto. Una vez que ya ha nacido, las fontanelas también permiten que el cerebro del bebé tenga suficiente espacio para poder desarrollarse.

5. ¿Cuándo empezar a ofrecer agua a los bebés?

Durante los primeros meses tras el nacimiento, los bebés sólo necesitan alimentarse con leche. La mejor opción y la más natural sin duda es la leche materna. Ya que contiene agua suficiente para satisfacer la sed del bebé, por lo que le protege frente a la deshidratación. 

6. La higiene, punto clave.

Los artículos de uso personal del bebé, ropa, lencería y utensilios de cocina deben ser manipulados con el cuidado requerido. 

Por ejemplo:

La ropa y lencería deben ser aseados con productos libres de fragancias y probados dermatológicamente. Se debe consultar al especialista la mejor alternativa para el bebé y su delicada piel.

Sus biberones, chupetes, chupones y todo lo que implique contacto con mucosas deben estar esterilizados conservando las medidas de asepsia adecuadas y almacenados en lugares limpios, libres de roedores e insectos.

Cambiar frecuentemente al bebé de pañal lo mantendrá limpio, seco y libre de irritaciones que generan muchas incomodidades en los pequeños. De igual manera te invitamos a visitar Huggies para que explores los tipos de pañales. 

La salud bucal del bebé también es importante. Se debe limpiar sus encías y su lengua para eliminar los residuos de leche, evitar infecciones bucales y fomentar futuros dientes sanos. Para ello se recomienda el uso de una gasa humedecida en agua tibia estéril y frotar suavemente dientes y encías.

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