Durante la niñez es común que los padres quieran educar a sus hijos a través de golpes, pero ¡ojo!, que sea común no significa que deba normalizarse.
Las consecuencias que traen los golpes son muchas y además acompañarán a tu hijo durante toda su vida.
Sí aún no conoces de qué consecuencias te hablo te invito a leer este artículo, donde te damos a conocer cuál es el daño que le haces a tus hijos al “educarlos” con golpes.
En muchas ocasiones quizá hemos pensado que la mejor forma de educar a nuestros hijos, es bajo los golpes, ya que hablándoles bien, no entienden…
Pero, en algún momento te has preguntado ¿Qué siente mi hijo cuando le doy golpes?
Quizá tu respuesta vaya hacia lo que padeciste en tu infancia, y que posiblemente atribuyas a los golpes el que tú hoy en día seas una persona de “bien”, sin embargo, debemos tomar en cuenta que en ocasiones los padres sienten tener todo el derecho sobre sus hijos, incluso derecho a golpear, sin importar que se estén violando algunos derechos de los niños.
En Little Play, te decimos algunas de las consecuencias en los niños que han sido educados a base de golpes.
- Miedo y desconfianza hacia los demás y esta será la etiqueta que marcará sus próximas relaciones, además son propensos a ejercer violencia en su vida adulta.
- Autoagresión, esto significa lastimarse a sí mismos ya sea a través de cortaduras, quemaduras o de alguna otra forma.
- Están propensos a padecer anorexia o bulimia.
- Regresiones que provoquen un descontrol de esfínteres, es decir, orinarse o hacerse popo
- Baja autoestima, desvalorización de sí mismos
Por eso, cuando le pegas a tu hijo no lo haces con la intención de educarlo, sino que únicamente estás mostrando tu enojo y tus conflictos emocionales.
Te invitamos a que leas nuestros artículos de crianza respetuosa para que así, puedas tener otra visión de la forma en que puedas educar a tus hijos, porque recuerda, los traumas son generados durante la infancia y estos serán ejercidos en la vida adulta.