El sueño y la lactancia se vuelve un aspecto importante cuando nos convertimos en madres, ya que el proceso de descanso se vuelve complicado y a veces imposible. Aquí te decimos lo que debes te damos algunos tips para que descanses mejor. ¡Lo mereces!

Después del nacimiento del bebé, es normal que la madre experimente ya sea una pérdida total o parcial de los patrones del sueño, ya que por instinto, la madre se pone en alerta por el cuidado del bebé.

Pero esto no significa que durante la fase de lactancia materna, la madre esté sujeta a numerosas noches de insomnio, porque como sabemos la leche materna libera sustancias que relajan tanto al bebé como a la madre.

Esa sustancia se llama  prolactina,  es la que genera la producción de leche, por lo tanto,  mientras amamanta, igualmente entra en un estado de relajación y descanso.

Por eso, cuando se da la lactancia materna como alimentación exclusiva la madre tiene espacios para dormir junto al bebé. 

En esta etapa la importancia del apego es fundamental, por lo que muchas expertas en pediatría y maternidad recomiendan practicar dormir juntos madre e hijo.

Además el contacto piel con piel con tu recién nacido y cada vez que éste succiona al comer activa una subida rápida de los niveles de oxitocina (la hormona del amor) que además reduce el riesgo de depresión.

Es importante saber que al inicio, tus periodos de sueño se vean afectados como se mencionó al inicio, sin embargo, hay que recordar que es una etapa y que ya llegará el momento en el que puedas descansar mejor.

Para ello, te dejamos algunos tips que puedas llevar mejor el proceso del sueño y la lactancia.

  • No dejes que el bebé llore desconsolado para acabar dándole el pecho igual, él se dormirá rápido pero tu nivel de estrés no te permitirá conciliar el sueño enseguida y vas a estar perdiendo maravillosos minutos de sueño, si lo haces a las primeras señales de necesidad de succión, en pocos segundos estarás durmiendo de nuevo.
  • No cambies el pañal del bebé durante la noche a no ser que tenga la piel irritada o muy sensible, ellos pueden dormir tranquilamente así, a menos que lo notes muy inquieto.
  • Puedes dar el pecho acostada y dormirte con él, no pasa nada, descansarás más. 
  • Si el bebé se despeja y el pecho ya no lo calma, puedes pedir ayuda a tu pareja.
  • Si quieres romper la asociación pecho-sueño, teniendo en cuenta que el bebé creará otra asociación seguramente menos llevadera, práctica y cómoda, puedes iniciar el destete nocturno (este artículo te puede interesar, da clic aquí)  total o parcial